En toda situación comunicativa podemos encontrar varias de las funciones del lenguaje, pero solo una de ellas prevalece y es la predominante sobre las otras. La comunicación se centra en uno de sus elementos -emisor, receptor, mensaje, canal, código o contexto- dependiendo de la finalidad que busca el emisor.
- Función Expresiva o Emotiva. Cuando el emisor pretende expresar sus emociones directamente.
- Función Apelativa o Conativa. El emisor quiere influir en el receptor para que siga sus indicaciones -órdenes, mandatos...-.
- Función Poética o Estética. El emisor se centra en la calidad del mensaje cuidándolo expresamente buscando la belleza, la sonoridad, la adecuación lingüística...
- Función Fática o de Contacto. El emisor comprueba que el canal comunicativo está abierto para confirmar que el receptor está recibiendo el mensaje.
- Función Metalingüística. El emisor explica al receptor el propio código, es decir, hablamos del lenguaje con el lenguaje -la definición de un término, la explicación de la ortografía, la sintaxis...-.
- Función Referencial, Denotativa o Contextual. El mensaje informa al receptor sobre el contexto que les engloba, o sea, se emite un mensaje objetivo sobre la realidad que nos rodea, ya sea histótica, social...
En este enlace tenéis más información y ejemplos de cada una de ellas.
Salud y cultura.
